22 de septiembre de 2009

Ganas de morir por amor.

Hace tan solo una hora que te se ha ido, me ha dejado tan sola, estoy tumbada en la cama, enredada en sabanas, desnuda, tal y como me ha dejado, llorando, sabiendo que esta será la ultima vez que nos veremos, que se va, no volverá, se ha ido, si ya se fue, ahora estoy quieta, sin saber que hacer, el día antes de marcharse me dice que me quiere, que me ama, que sin mi no es nada, y se va, como si me hubiera dicho una tontería. Después de mil lágrimas derramadas por mil tíos, mil gilipollas, me doy cuenta en el peor momento, que le amo a él. Me voy a la ducha, desnuda, intentando memorizar su olor, el olor que ha dejado en mi ambiente. Pronto veo que en la silla está su chaqueta, aquella que me encantaba ponerme de noche, después de un cacao caliente en la terraza de su ático, Me envolví en su chaqueta, inspirando su aroma. Algo cayó del bolsillo, un trozo de papel azul, lo cogí y lo leí: te quiero, estación sur a las 12.30.
Miré el reloj, no pasaban de las doce, me vestí, y corrí hasta la estación, al llegar solo había una silueta parada, me acerqué y le vi.
-Te quiero.
-Iré contigo hasta el fin del mundo.

2 comentarios:

Nana SevenUp dijo...

me encanta...te sigo ^^

Pauliña dijo...

siempre juntos, hasta el final.