24 de enero de 2010

Miraditas indiscretas.

Primero él y ella aparta la mirada, luego ella y él gira la cabeza. Se pasan así todo el trayecto hasta clase, es raro para la gente que pasa a su lado, no hablan van en silencio inmersos en sus pensamientos. Ella decide hablar.
-¿Por qué nunca decimos nada? -Adrienne miró a Pit, enarcando una ceja.
-Estoy demasiado encerrado en ti como para hablar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es realmente bonito que alguien asuma la responsabilidad de decir tal cosa.