7 de abril de 2010

Historia de dos.[3]

Ya se ha ido. No tiene ganas de decir nada, de quizá mandarle un e-mail y soltarle todo lo que piensa a cerca de que él no le haya dado nada. Ni una simple explicación. Pero sabe que la dolerá. Qué dolerá mucho saber que él ya no la quiere, al menos no como antes. Y a lo mejor prefiere saber que las cosas nunca volverán a ser iguales. ¿Para qué? Si él... buah. Coge el ipod y se pone a escuchar una canción que un gran amigo le descubrió. Quizá de un grupo que la gusta poco, pero, la canción la ha encantado. ¡Vamos que si la ha encantado, no para de escucharla!
Sé que es más fácil tirar la toalla que echarle valor.
Tararea trocitos de la canción, y no puede evitarlo, se echa a llorar. En poco se quedará dormida, porque sus lágrimas son así. Quizá sueñe que él a vuelto o quizá tenga una pesadilla de esas de las que te despiertas sudando y con una sensación de vacio enorme.
Y dime cuando fue el momento, dime donde nos dejamos los besos.

No hay comentarios: